Trump promete fin “de inmediato” a TPS para somalíes en Minnesota

Publicado: 22 nov 2025, 14:29 GMT-5|Actualizado: hace 2 horas

La promesa del presidente Donald Trump de poner fin a las protecciones legales temporales para los somalíes que viven en Minnesota ha desatado una ola de temor en una comunidad inmigrante sumamente arraigada en el estado, así como dudas sobre si la Casa Blanca tiene la autoridad legal para promulgar la directiva tal como se describe.

El mandatario publicó la noche del viernes en su plataforma de redes sociales Truth Social que a los residentes somalíes de Minnesota se les retiraría “de inmediato” el Estatus de Protección Temporal (TPS por sus iniciales en inglés), una salvaguarda legal contra la deportación para inmigrantes de ciertos países.

El anuncio provocó una respuesta inmediata de algunos líderes estatales y expertos en inmigración, quienes se refirieron a las amenazas de Trump como un intento sin muchos fundamentos legales para sembrar miedo y sospecha hacia la comunidad somalí de Minnesota, la más grande del país.

“No hay un mecanismo legal que le permita al presidente poner fin al estatus de protección para una comunidad o estado en particular con el que tenga problemas”, aseguró Heidi Altman, directora de políticas del National Immigrant Justice Center.

“Trump está haciendo lo que siempre hace: demagogia contra los inmigrantes sin justificación ni evidencia y usar esa demagogia en un intento por retirar importantes protecciones que salvan vidas”, agregó.

La protección para los somalíes ha sido extendida 27 veces desde 1991, después de que las autoridades estadounidenses han determinado que las condiciones en Somalia no son lo suficientemente seguras para que las personas que ya se encuentran en Estados Unidos puedan regresar a ese país.

Sin embargo, el gobierno de Trump podría tomar medidas para retirar las protecciones legales para los somalíes a nivel nacional. Pero eso afectaría sólo a una pequeña fracción de las decenas de miles de somalíes que viven en Minnesota. Según un informe elaborado para el Congreso en agosto pasado, únicamente hay 705 somalíes al amparo del TPS a nivel nacional

“Soy ciudadana, al igual que la mayoría de los somalíes en Estados Unidos”, señaló la representante por Minnesota Ilhan Omar, una demócrata de origen somalí. “Buena suerte celebrando un cambio de política que realmente no tiene mucho impacto en los somalíes a los que amas odiar”.

Aún así, grupos activistas advirtieron que la medida podría avivar el odio contra una comunidad en un momento de creciente islamofobia.

“Esto no es sólo un cambio burocrático”, dijo Jaylani Hussein, presidente del Council on American-Islamic Relations para su oficina en Minnesota. “Es un ataque político a la comunidad somalí y musulmana impulsado por una retórica islamofóbica y de odio”.

En su publicación en redes sociales, Trump afirmó, sin ofrecer evidencia, que las pandillas somalíes han atacado a los residentes de Minnesota y se refirió al estado como un “centro de actividad fraudulenta para el lavado de dinero”.

Fiscales federales han presentado cargos en las últimas semanas contra decenas de personas que forman parte de un plan de fraude de servicios sociales. Algunos de los acusados son originarios de Somalia.

El gobernador de Minnesota, el demócrata Tim Walz, ha señalado que su estado se ubica consistentemente entre los más seguros del país.

“No es de sorprender que el presidente haya elegido atacar de manera generalizada a toda una comunidad”, señaló Waltz el viernes. “Esto es lo que hace para cambiar de tema”.

Activistas comunitarios destacan que la diáspora somalí en Minnesota ha ayudado a revitalizar los corredores del centro de Minneapolis y juega un importante papel en la política del estado.

“La verdad es que la comunidad somalí es querida y está profundamente entrelazada en muchos de los vecindarios y comunidades de Minnesota”, subrayó Altman. “Desestabilizar a familias y comunidades nos deja a todos menos seguros, no más”.

Como parte de un impulso más amplio por adoptar políticas de inmigración más estrictas, la Casa Blanca ha tomado medidas para retirar varias protecciones que les habían permitido a los inmigrantes permanecer en Estados Unidos y trabajar legalmente.

Entre ellas se incluye el fin del TPS para 600,000 venezolanos y 500,000 haitianos que recibieron protecciones durante la presidencia de Joe Biden. El gobierno de Trump también ha buscado limitar las protecciones previamente extendidas a migrantes procedentes de Cuba, Siria, y otros países.