Gobierno de Trump designa a 2 otras pandillas en América Latina como grupos terroristas

Publicado: 5 sep 2025, 08:53 GMT-4|Actualizado: hace 8 horas

QUITO (AP) — Estados Unidos designó a dos pandillas ecuatorianas como organizaciones terroristas extranjeras, la medida más reciente del gobierno del presidente Donald Trump para combatir a los cárteles en Latinoamérica.

El secretario de Estado estadounidense Marco Rubio hizo el anuncio el jueves durante su visita a Ecuador, en el marco de una gira por América Latina ensombrecida por un ataque militar de Washington contra la pandilla venezolana Tren de Aragua, a la que Estados Unidos también considera terrorista. Este ataque ha generado preocupación en la región sobre lo que podría seguir en un momento en que el gobierno de Trump se ha comprometido a intensificar la actividad militar para combatir el narcotráfico y la migración ilegal.

“En esta ocasión no sólo vamos a cazar a los narcotraficantes en las pequeñas lanchas rápidas y decir: ‘tratemos de arrestarlos’”, declaró Rubio en una conferencia de prensa en Quito. “No, el presidente ha dicho que quiere declarar la guerra a estos grupos porque han estado en guerra con nosotros durante 30 años y nadie ha respondido”.

El Departamento de Defensa estadounidense indicó el jueves por la noche que dos aviones militares venezolanos volaron cerca de un buque de la Armada de Estados Unidos en aguas internacionales, maniobra que calificó de “movimiento altamente provocativa”, y le advirtió al gobierno del presidente Nicolás Maduro que se abstenga de realizar acciones similares en el futuro.

Otras 2 pandillas son designadas grupos terroristas

Los dos nuevos grupos designados, Los Lobos y Los Choneros, son pandillas ecuatorianas a las que se atribuye gran parte de la violencia que comenzó durante la pandemia de COVID-19. La designación, dijo Rubio, ofrece “todo tipo de opciones” para que Washington trabaje en conjunto con Quito con el fin de acabar con estos grupos.

Esto incluye la capacidad de abatirlos, al igual que tomar medidas contra las propiedades y cuentas bancarias en Estados Unidos de los miembros de esas organizaciones criminales y personas vinculadas con ellas, expresó Rubio. Dijo también que la etiqueta sería de utilidad en el intercambio de datos de inteligencia.

Los Choneros, Los Lobos y otros grupos similares están involucrados en asesinatos por encargo, operaciones de extorsión y el trasiego y venta de drogas. Las autoridades los han culpado por la creciente violencia en el país, generada por su lucha por las rutas de tráfico de drogas hacia el Pacífico y el control del territorio, incluso dentro de las prisiones, donde cientos de reclusos han sido asesinados desde 2021.

El ataque estadounidense en el Caribe causa gran impresión

El ataque ha captado la atención en el viaje de Rubio, que incluyó una escala en México el miércoles.

Las autoridades estadounidenses dicen que el cargamento de la lancha estaba destinado a Estados Unidos y que en el ataque murieron 11 personas, pero aún no han explicado cómo fue que los militares determinaron que quienes iban a bordo eran miembros del Tren de Aragua.

Rubio señaló que las acciones de Estados Unidos estaban dirigidas más hacia Venezuela, y no a México.

“No hay necesidad de hacer eso en muchos casos con gobiernos amigos, porque los gobiernos amigos nos van a ayudar”, dijo Rubio a los periodistas. “Podrían hacerlo ellos mismos, y les ayudaremos a hacerlo”.

Un día antes, Rubio justificó el ataque al decir que la lancha representaba una “amenaza inmediata” para Estados Unidos, y que Trump optó por “volarla” en lugar de seguir lo que había sido el procedimiento estándar de detener y abordar, arrestar a la tripulación y confiscar cualquier contrabando a bordo.

El ataque fue recibido con reacciones dispares por parte de diversos gobernantes en América Latina, donde la historia estadounidense de intervenciones militares y diplomacia con las armas está impresa en la memoria. Muchos, como las autoridades en México, tuvieron cuidado de no condenar abiertamente el ataque. Sin embargo, sí enfatizaron la importancia de proteger la soberanía nacional y advirtieron que una mayor participación militar de Estados Unidos podría resultar contraproducente.

Ecuador pasa apuros con el tráfico de drogas

El presidente Daniel Noboa le agradeció a Rubio por los empeños de Estados Unidos para “eliminar realmente cualquier amenaza terrorista”. Antes de su reunión, Rubio había dicho en redes sociales que Washington y Quito están “alineados como socios clave para poner fin a la inmigración ilegal y combatir el crimen transnacional y el terrorismo”.

En el más reciente Informe Mundial sobre las Drogas de Naciones Unidas se indica que varios países sudamericanos, entre ellos Colombia, Ecuador y Perú, reportaron mayores incautaciones de cocaína en 2022 que en 2021, pero no se le asigna a Venezuela el papel desmesurado que la Casa Blanca le ha dado en los últimos meses.

“No me importa lo que diga la ONU. No me importa”, manifestó Rubio.

La violencia se disparó en Ecuador desde la pandemia de COVID-19. Los narcotraficantes expandieron sus operaciones y aprovecharon la industria bananera del país, el mayor exportador de plátanos del mundo. Los traficantes encuentran en los contenedores marítimos llenos de la fruta el vehículo perfecto para contrabandear sus productos.

Cárteles de México, Colombia y los Balcanes se han asentado en Ecuador porque utiliza el dólar estadounidense y tiene leyes e instituciones débiles, junto con una red de pandillas establecidas desde hace tiempo —incluidos Los Choneros y Los Lobos— que están ansiosas de trabajo.

Ecuador también ganó prominencia en el comercio global de cocaína después de los cambios políticos ocurridos en Colombia durante la década pasada. Los campos de coca en ese país se han trasladado más cerca de la frontera con Ecuador, ello debido a la desintegración de grupos delictivos tras la desmovilización del grupo rebelde Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia en 2016.

En julio, Ecuador extraditó a Estados Unidos al líder de Los Choneros, José Adolfo Macías Villamar, alias “Fito”. Macías escapó de una prisión ecuatoriana el año pasado y fue recapturado en junio, dos meses después de que fuera acusado formalmente en Nueva York de importar miles de kilos de cocaína a Estados Unidos.